Hasta hace poco tiempo, los odontólogos rellenaban y sellaban las caries exclusivamente con amalgama (de plata y mercurio). Desafortunadamente, estos empastes o restauraciones son tóxicas, poco estéticas y podrían debilitar los dientes porque con demasiada frecuencia se debe extraer una gran cantidad de tejido dental para crear la retención dentro de la cavidad. La odontología moderna recurre cada vez más a las resinas compuestas como una alternativa fuerte, segura y de aspecto más natural. Los resinas compuestas utilizan una sustancia a base de plástico de muchísimos colores estéticos, mezclada con cerámicas que se endurece al aplicársele luz halógena hasta convertirse en un material fuerte y atractivo 

 

Pros y contras de las espinas compuestas: La principal ventaja de estos empastes es que vienen en una gama de tonos que se asemejan mucho al color de los dientes de una persona. Debido a la mayor resistencia del material compuesto moderno, ahora también se pueden usar en los dientes posteriores. Desafortunadamente, los empastes compuestos son de 1 1/2 a 2 veces más costosos que las restauraciones de amalgama por la cantidad de elementos y biomateriales que se deben utilizar para lograr un acabado perfecto. Los seguros dentales y las EPS cubren el costo de los empastes hasta el precio de los empastes de plata/mercurio.

 

Procedimiento: El odontólogo comienza anestesiando el diente y eliminando cualquier caries restante. Una vez que se ha preparado el diente, el odontólogo coloca el compuesto en el diente donde se une a la superficie original. El proceso generalmente se realiza en varias capas, las más profundas se realizan con resinas de color dentina y las mas superficiales con resinas de color esmalte, adicionándole las formas naturales de los dientes, cúspides, surcos, rosetas y vertientes, dandole una forma natural y resistente. estas capas se curan o endurecen con el uso de una luz azul especial. Estas restauraciones (empastes) para los dientes posteriores se conocen como un procedimiento compuesto directo. Las restauraciones indirectas deben hacerse a la medida en un laboratorio dental externo y se requieren dos visitas al odontólogo. Una vez que el consultorio dental recibe las incrustaciones personalizadas, el paciente regresa al consultorio del odontólogo, donde se colocarán las incrustaciones en su lugar. Las incrustaciones individuales no son solo materiales compuestos; a menudo están hechos de porcelana (disilicato o Zirconio). Después de colocar las resinas Los pacientes pueden tener una mayor sensibilidad en el diente durante algunos días después del procedimiento. Las resinas compuestas son porosas, aunque ahora muchísimo menos que antes por su elaboración con nanotecnología y la adición de cerámicas a la composición, lo cual les brinda mayor resistencia, mejor pulido y brillo, pero con el tiempo, pueden mancharse con el café, el té, el tabaco, etc. Muchos odontólogos colocan una cubierta transparente sobre el empaste para evitar que se manche en el futuro. Los empastes compuestos suelen durar de 3 a 6 años, según la ubicación de la restauración, la oclusión (o mordida) de la persona y el cuidado en el hogar. Las incrustaciones de porcelana indirectas no se pigmentan como las resinas compuestas directas.